9 de mayo de 1883- España |
“Yo
soy yo y mi circunstancia”
El yo se encuentra en la vida con el mundo, con su
mundo. No es cierto que primero nos encontremos a nosotros y después al mundo;
nos encontramos a nosotros sólo en la medida en que nos vemos instalados en el
mundo, en cuanto que nos ocupamos con las cosas, con las personas, con nuestra
circunstancia. Mi yo se va formando en su encuentro con el mundo y a partir
de sus reclamaciones. Mundo es lo que hallo frente a mí y en mi derredor,
lo que para mí existe y actúa.
La vida
es siempre estar en una circunstancia, no se vive en un mundo abstracto e
indeterminado; el mundo vital nuestro es siempre nuestro mundo, el de nuestro
aquí y ahora, y es a partir de él como debemos actuar y modelar nuestro futuro;
este hecho permite precisamente la libertad, la pura indeterminación la haría
imposible. La fatalidad en la que se desenvuelve nuestra vida no es tan extrema como para
determinar absolutamente la conducta que vamos a seguir: no sentimos que nuestra vida esté
prefijada totalmente pues la circunstancia nos permite un cierto margen de
posibilidades y, en la misma medida, nos exige decidir, y
además sin que nadie lo pueda hacer por nosotros. La vida no nos viene ya hecha, es
un constante decidir lo que vamos a ser, las cosas que hacemos, nuestras ocupaciones. No podemos escoger
el mundo, la circunstancia básica en la que nos ha tocado vivir; pero, a la
vez, esta circunstancia nos ofrece un margen de posibilidades: “vida es la libertad en la fatalidad y la fatalidad en la
libertad”. Tenemos que decidir lo que vamos a ser, la vida es “sostenerse en el propio ser”. La vida es un problema
que nadie, excepto nosotros, puede resolver. Y este tener que elegir y ser
responsables de lo que nos va a pasar no se da sólo en casos extremos, en
las situaciones conflictivas o apuradas, se da siempre. Como consecuencia del
encontrarse en la vida sin remedio y sin remedio tener que elegir, la
vida se presenta siempre como un problema, problema que nadie excepto
nosotros puede resolver.
De: Torre de Babel- Portal de Filosofía, Psicología
y Humanidades
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